Conoce las terapias de luz que vienen siendo utilizadas para tratamientos de Parkinson, Alzheimer y Trastornos del sueño.
Por: Alex Mesa
Las terapias de luz, en particular la terapia con luz roja y luz infrarroja, han sido objeto de investigación en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer, el Parkinson y trastornos del sueño. Aunque los resultados no son concluyentes y aún están en sus primeras etapas y no se considera una cura definitiva, se han observado algunos efectos positivos en los pacientes que han buscado una alternativa.En nuestro nuevo artículo de #VCP te presentamos las últimas investigaciones que se llevan a cabo. #Conluztodoesposible
- Fotobiomodulación (PBMT): Esta terapia utiliza luz de baja intensidad (luz roja y luz infrarroja) para estimular las mitocondrias en las células. Se cree que esto puede ayudar a mejorar la función celular y promover la reparación de tejidos. En el contexto de enfermedades neurodegenerativas, la PBMT se ha estudiado para reducir la inflamación cerebral y mejorar la función cognitiva.
- Estimulación cerebral profunda (DBS): la DBS es un tratamiento para el Parkinson que implica la implantación de electrodos en el cerebro y la estimulación eléctrica de regiones específicas. Algunos investigadores están explorando la posibilidad de combinar la DBS con la terapia de luz para mejorar los resultados en pacientes con Parkinson.
- Aplicación en la piel y el cuero cabelludo: En algunos estudios, se ha aplicado luz roja lejana e infrarroja directamente en la piel o el cuero cabelludo para estimular las células cerebrales y reducir la inflamación. Esto se ha estudiado principalmente en el contexto de la enfermedad de Alzheimer.
- Mejora de la función mitocondrial: Se ha observado que la terapia de luz mejora la función mitocondrial en las células, lo que podría ser beneficioso para las enfermedades neurodegenerativas, ya que la disfunción mitocondrial está relacionada con la patogénesis de estas enfermedades.
- Para los trastornos del sueño se ha utilizado las terapias de luz brillante (TLB): Que implica la exposición a una luz brillante y blanca de espectro continuo algo un poco similar al del sol, durante un período específico de tiempo, generalmente por la mañana. Esta terapia se utiliza para regular el ritmo circadiano y ha demostrado ser eficaz en el tratamiento del trastorno afectivo estacional (TAE) y el trastorno del sueño retrasado en fase.
La luz también parece estimular las respuestas bioquímicas sin un estricto requisito como es el de percepción visual. La evidencia reciente de experimentos con animales ha sugerido que la iluminación del tronco (y no de la cabeza o los ojos) todavía ofrece efectos neuroprotectores, es probable que la luz active una o más moléculas o células en el cuerpo, como células inmunitarias, mediadores inflamatorios o células madre derivadas de la médula ósea. Es decir, diferentes tejidos y órganos del cuerpo pueden responder de manera diferencial a la estimulación de la luz. Además, diferentes biomoléculas expresadas en las células inmunitarias circulantes y en las células madre son sensibles a longitudes de onda específicas de la luz y, por tanto, provocan respuestas diferentes al promover la secreción de factores neurotróficos que pueden rescatar las funciones neuronales.
Es importante destacar que todos los estudios y pruebas continúan en proceso de análisis no concluyentes y aún están en desarrollo, y se necesitan obtener muchos mejores resultados clínicos para comprender completamente los efectos y la eficacia de estas terapias de luz en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas. Si estás interesado en explorar estas terapias como parte de un tratamiento, es fundamental consultar a un médico especializado en neurología o investigar centros médicos y clínicas que estén llevando a cabo investigaciones en este campo para obtener información actualizada y orientación profesional.
